Hace unos meses andaba haciendo cola para pagar en una tienda de electrónica. El señor que tenía delante, al llegar al dependiente y tras consultar algo, empezó a vociferar enfadado para acabar sentenciando “malditos humanos, ya lo tramitaré por la pagina web”. Parecería que, cada día que pasa, la atención informatizada es más eficiente que los imperfectos humanos. Esto viene al caso ante el gran revuelo que está creando la inteligencia artificial. Son múltiples las áreas que está revolucionando. Todavía se oyen las carcajadas de los primeros artículos redactados por periodistas cibernéticos, pero no estaría tan tranquilo ante su espectacular evolución. Las aulas vienen revueltas, existen chatbots de última generación que pueden responder exámenes, resolver operaciones matemáticas o aclarar dudas. La diferencia con Google es sustancial. Le puedes consultar con una pregunta como lo harías a un profesor. Atrás queda preguntarle a Google como un indio. Unos de los más conocidos está creado por la empresa OpenAI y, como no, aparece el omnipresente Elon Musk como uno de los fundadores. Como un ejercicio de inteligencia artificial le pregunté: ¿Qué funciones tendría que tener un clúster de economía circular? A lo que el bot respondió: Un clúster de economía circular debería tener las siguientes funciones:
1. Fomentar la colaboración y el intercambio de conocimiento entre las empresas y organizaciones involucradas en la economía circular. 2. Desarrollar soluciones innovadoras y sostenibles para la gestión de residuos y la reducción de emisiones de carbono. 3. Promover la adopción de prácticas sostenibles y la implementación de tecnologías avanzadas para una economía circular. 4. Mejorar la competitividad de las empresas y organizaciones involucradas a través del acceso a nuevas oportunidades de mercado y la optimización de costos. 5. Sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la economía circular y promover su participación activa.
Prometo que no he añadido ninguna palabra ni he corregido, ni semántica ni sintaxis, solo algún acento. Bromas aparte, y no tan bromas, el pasado 18 de julio se constituyo el Clúster de Residus de Catalunya. El Clúster Residuos es una iniciativa conjunta de la Agencia de Residuos de Catalunya y ACCIÓ con el objetivo de agrupar a empresas y agentes en torno a toda la cadena de valor del sector. Esto implica ir desde el origen Malditos humanos Xavier Riba, Presidente del Gremi de Recuperació de Catalunya xriba@gremirecuperacio.org del residuo, pasando por su gestión (recogida, clasificación, tratamiento y valorización) y llegar hasta su fin de ciclo de vida o al cliente final de la materia prima secundaria. Con esta visión de la cadena de valor, el sector de los residuos está formado en Catalunya por 693 empresas que facturan 10.000 millones de euros y reúnen a unos 41.000 trabajadores.
La mayoría de estas empresas, un 86%, son operadores de residuos; pero estas cifras también incluyen a productores de bienes de equipo y tecnologías de tratamiento, construcción de infraestructuras e instalaciones, consultoría, ingeniería y control y análisis. En un sector en constante transformación, que afronta nuevos desafíos y donde es clave la economía circular, aparecen nuevos retos estratégicos de futuro. El objetivo del Clúster es ser un elemento dinamizador en todos los aspectos clave del negocio (me- jora de la competitividad, proyectos de I+D, apertura de nuevos mercados, etc.) a través del trabajo conjunto de toda la cadena de valor, creando en Cataluña una iniciativa clúster simi- lar a las que se desarrollan a nivel internacional.
Al hilo del Clúster de Residuos, seguí jugando con el Bot:
¿Quiénes tendrían que formar parte del clúster de residuos?
Un clúster de residuos tendría que estar formado por una variedad de actores relevantes, incluyendo:
1. Empresas de gestión de residuos: Estas empresas son responsables de la gestión y el tratamiento de los residuos.
2. Fabricantes y productores: Estos actores son responsables de la pro- ducción de productos y envases que generan residuos.
3. Instituciones gubernamentales: Los gobiernos locales y naciona- les son responsables de establecer políticas y regulaciones para la ges- tión de los residuos y suelen estar involucrados en la planificación y la implementación de soluciones sostenibles.
4. Organizaciones no gubernamen- tales: Las ONGs y grupos de defensa
ambiental pueden desempeñar un papel importante en la sensibilización y la promoción de prácticas sosteni- bles de gestión de residuos.
5. Académicos y expertos en tecno- logía: Estos actores pueden ofrecer soluciones innovadoras y conoci- miento técnico en el área de gestión de residuos.
6. Comunidades locales: Las comu- nidades locales son un componente importante de cualquier clúster de residuos, ya que pueden aportar una perspectiva valiosa sobre las nece- sidades y desafíos específicos de su área y también pueden ser parte activa en la implementación de so- luciones sostenibles.
Es importante destacar que un clúster de residuos exitoso requiere de una colaboración efectiva y una comunicación abierta entre todos los actores involucrados para garantizar soluciones sostenibles y efectivas para la gestión de los residuos.
¡La verdad es que nuestro ami- go cibernético habla como un libro abierto!
Aplaudo la iniciativa de la Agencia de Residuos de Catalunya y ACCIÓ y, como punto débil de la iniciativa, es la falta de las empresas fabricantes responsables de la producción de bienes que luego los recuperado- res habremos de reciclar. También
faltarían las ONG’s, según nuestro listo amigo. Parecería que vamos a un mundo que, como en las novelas de ciencia ficción, nos gobiernan las computadoras.
Voy a acabar el articulo haciéndole al bot una última pregunta:
¿Qué sistema de reciclaje consigue los índices más altos de recuperación de latas y envases de PET?
Los sistemas de reciclaje que logran los índices más altos de recupera- ción de envases son aquellos que combinan incentivos económicos y separación en origen. Algunos de los sistemas más efectivos incluyen:
Sistema de depósito: Este sistema implica la recolección separada de latas y el pago de un pequeño de- pósito al comprador. Al devolver las latas vacías, se recibe un reembolso.
Sistema de reciclaje selectivo: Este sistema implica la separación de las latas en origen y su posterior proce- samiento para su reutilización.
Estos sistemas han demostrado ser muy efectivos en términos de tasa de reciclaje y han sido implementados con éxito en muchos países. Sin em- bargo, es importante destacar que el éxito de estos sistemas depende de la participación de los consumidores y de la colaboración de todos los actores relevantes, incluyendo a las empresas, los gobiernos y la sociedad en general.
Sin palabras. Creo que no queda mucho tiempo para que, al ir a votar, apartemos las papeletas de partidos políticos y decidamos votar al nuevo bot de IA de Google, IBM, o OpenAI.
Al final tendrá razón el señor mal- humorado del principio de mi edi- torial.