Las ventas de autos en EE UU reviven en julio gracias a los incentivos fiscales

05/08/2009

05/08/2009

Las ventas de automóviles en Estados Unidos durante el mes de julio alcanzaron su mayor nivel en 11 meses, impulsadas por una ola de consumidores que llegaron a los concesionarios atraídos por el programa de incentivos del gobierno conocido como «efectivo por chatarra».

Las automotrices vendieron 997.284 autos y camionetas en julio, la mayor cifra mensual desde agosto de 2008, según Autodata Corp.

La tasa anualizada de ventas, un indicador seguido muy de cerca en el sector, ascendió a 11,24 millones de vehículos como resultado del alza en las ventas después que el programa del gobierno, que otorga una devolución de hasta US$4.500 a quienes cambien su auto viejo por uno nuevo que ahorre más combustible, entrara en vigencia los últimos ocho días del mes. Aunque esta cifra aún está por debajo de los 12,5 millones del año pasado y dista mucho de los 16 millones de autos anuales vendidos a principios de la década, constituye un salto signifi cativo frente a la tasa anualizada de junio de 9,69 millones.

De no mediar los incentivos del gobierno «probablemente estaríamos hablando de una tasa de ventas de 10 millones», dijo George Pipas, el principal analista de ventas de Ford Motor Co. en una conferencia telefónica.

General Motors Co. estima que vendió 118.000 vehículos en julio con las devoluciones del programa, lo que la ayudó a incrementar la tasa anualizada de ventas en cerca de un millón de unidades, informó la compañía.

Ford y la surcoreana Hyundai Motor Co. fueron los principales benefi ciados del alza en las ventas. Ford reportó ventas de 164.795 vehículos, un aumento de 2,4% frente al mismo mes del año pasado. Las ventas de Hyundai avanzaron 22% en parte porque la automotriz alentó a sus concesionarios a que comenzaran a aceptar ventas bajo el programa del gobierno antes que este especificara todos los detalles.

Con la bancarrota ya en el espejo retrovisor, GM y Chrysler Group LLC sufrieron sus declives de ventas más leves del año. Las ventas de GM retrocedieron 19,4% a 188.156 autos, mientras que las de Chrysler cayeron 9,4% a 88.900 unidades.

Las ventas de Toyota Motor Corp. , en cambio, se redujeron 11% a 174.872 vehículos. La empresa calculó que el programa fi scal impulsó las ventas en entre 30.000 y 32.000 vehículos. Su compacto Corolla y el híbrido Prius representaron el 40% de los autos vendidos a través del programa estatal. Honda Motor Co. dijo que vendió 114.690 vehículos en julio, un declive de 17,3% frente a julio de 2008, cuando la automotriz japonesa registró fuertes ganancias en un momento en que los altos precios del combustible aumentaron el atractivo de su línea de autos pequeños.

Pese al repunte de julio, las ventas de autos en EE.UU. siguen siendo débiles comparadas con los estándares históricos. Durante la primera mitad de la década las automotrices vendían rutinariamente cerca de 17 millones de vehículos al año.

Además, el futuro del programa de «efectivo por chatarra» no está claro.

Los US$1.000 millones que se destinaron para financiarlo probablemente ya se agotaron y los republicanos han indicado que se oponen a los esfuerzos de los demócratas por inyectar otros US$2.000 millones al programa. «Esta aún es una situación muy frágil», dijo Pipas.

Tampoco se sabe a ciencia cierta qué impacto tendrá el programa en la economía estadounidense. En una señal positiva, Hyundai reveló el lunes que su planta en el estado de Alabama regresará a una semana laboral de cinco días después de operar con horarios reducidos desde mediados de octubre. Ford planeaba aumentar la producción en el tercer trimestre, pero dijo que reevaluará la situación a finales de agosto. Toyota dijo que incrementará la producción en el tercer trimestre en 65.000 vehículos. La producción total de la compañía en Norteamérica alcanzó en junio su nivel más alto desde octubre, unos 108.261 vehículos, casi el doble del nivel de enero.

Estos aumentos de producción afectarán a la economía real a medida que los proveedores de materias primas y los fabricantes de autopartes hagan lo propio para satisfacer la mayor demanda. La siderúrgica AK Steel Holding Corp. y el fabricante de aluminio Alcoa Inc. señalaron recientemente que esperan beneficiarse del repunte de las automotrices.

Uno de los factores poco mencionados del éxito del programa de efectivo por chatarra son los esfuerzos a nivel local de los concesionarios para captar clientes.

En el concesionario Moore Buick-Pontiac-GMC Truck en Los Gatos, California, las ventas de vehículos nuevos habían caído entre 10% y 15% antes de que se lanzara la iniciativa, pero subieron cerca de 50% hasta el viernes. «Todos los concesionarios habían reducido su personal, pero ahora necesitamos más gente. Hay mucha más actividad que antes», dice Bret Moore, gerente general de ventas.