Según las firmas de servicios profesionales Deloitte Touche Tohmatsu y PricewaterhouseCoopers (PWC), la industria global del metal estará cada vez más sometida a la ley del más fuerte durante la actual recesión. Las compañías más fuertes sobrevivirán y consumirán a las débiles, dado que el deseo de adquirir se ve potenciado por la disponibilidad de activos baratos.
Casi el 25% de los ejecutivos de la industria del metal sondeados en el 12º sondeo global anual de PWC afirman que llevarán a cabo una fusión o adquisición internacional durante los próximos doce meses para aumentar su área de influencia geográfica.
Por otro lado, Malcolm Wren, especialista en finanzas corporativas y fusiones y adquisiciones de PWC, afirma que el volumen de acuerdos se verá reducido a corto plazo.
Aún así, «las compradoras que disfruten de una buena situación económica tendrán oportunidades para recuperar activos vendidos como consecuencia de reestructuraciones y ventas de secciones prescindibles por parte de otras empresas».
Claude Martin, jefe de procesos globales del grupo de industria productora global Deloitte, también opina que los activos a bajo precio resultarán tentadores para aquellos con unas cuentas bien saneadas.
«Para algunas compañías, está claro que van a intentar realizar algunas adquisiciones», afirma en un comunicado enviado a Steel Business Briefing.
«Necesitan más .masa crítica’. Disponen de efectivo, así que por supuesto que buscarán gangas», añade.
Deloitte afirma que tales procesos de fusión podrían suponer un beneficio estructural a largo plazo para la industria, ya que reducirían la competencia.