Cómo rescatar los muebles metálicos del óxido antes de repintarlos

01/10/2021

Los muebles de metal, sobre todo los que se encuentran en espacios exteriores y sometidos a la acción de la humedad, pueden oxidarse con mayor a menor facilidad, dependiendo del tratamiento de protección que hayan recibido, sufriendo cambios en su aspecto y su integridad.

Por lo general, la manera más sencilla de devolverles una imagen renovada consiste en repintarlos; sin embargo, antes de aplicar la primera mano de esmalte o acrílico sobre la superficie afectada será necesario un trabajo de preparación, si es que se desea detener el avance del óxido y obtener un resultado más duradero.

Cabe destacar que las siguientes recomendaciones no sólo se aplican a muebles, sino que también pueden seguirse para rescatar otras estructuras de metal, como escaleras, barandas, guías, marcos de ventanas y puertas, etc.

Cuando se trata de superficies que recién comienzan a mostrar una oxidación incipiente, conviene usar un cepillo de alambre para eliminar el óxido en polvo del metal, para luego aplicar una imprimación con un material que inhiba la oxidación. Una vez hecho esto y esperado el tiempo de secado recomendado por el fabricante, se está en condiciones de pintar el mueble de metal recuperado.

El primer paso es limpiar el óxido suelto y la pintura descascarada y luego aplicar el imprimador que inhiba la oxidación. No es necesario que se descanse sobre metal brillante, sino que basta con limpiar las escamas y el óxido de la superficie que son los que impiden que la pintura se adhiera.

En caso de mobiliario de hierro o acero más antiguo, que presente capas más gruesas de óxido, se pasa primero el cepillo de alambre. Si el área sobre la que se está trabajando está muy oxidada y picada, es casi seguro que el trabajo de limpieza requerirá el uso de herramientas más sofisticadas, como un taladro con un disco o cepillo circular de alambre, masilla para rellenar y una imprimación con un producto más fuerte que en los casos de oxidación ligera.

Uso de herramientas eléctricas para remover el óxido de los muebles de metal

Una alternativa al taladro puede ser una amoladora angular. En ambos casos (taladro o amoladora) es mejor consultar en la ferretería sobre cuáles serían los discos más adecuados para realizar el trabajo de quitar el óxido de los muebles de metal. También es importante seguir las instrucciones de uso del fabricante de los aparatos y acatar sus recomendaciones de seguridad.

Para ayudar a una mejor limpieza a fondo de áreas muy oxidadas o demasiado delicadas existen en el mercado distintos convertidores de óxido, que impregnan el o las áreas afectadas y las convierten en superficies que no se oxidan, dejándolas aptas para recibir las capas de pintura nueva que les permitirán recuperar la belleza que tenían en un principio.

Fuente: albañiles.org