Desde hace años, las diferentes administraciones hablan de la famosa “ventanilla única”. Todos los trámites de alta de empresa se realizarían en una sola ventanilla. Es un factor que dinamiza la creación de empresas, genera empleo y enriquece el tejido empresarial. En pocas horas o días tienes tu empresa en marcha. Según país se llama de diferente manera. En Australia, centrelink, en UK, one stop source, en Francia, guichet unique. En Barcelona, Barcelona Activa facilita, desde hace años, la creación de empresas en su vivero del Poblenou.

Pero en nuestro sector las cosas son diferentes. O quizás no tanto, o depende de cómo. Como si gestionásemos plutonio enriquecido, las licencias de actividad de gestión de residuos legalizadas son un tortuoso y lago camino.

Los emprendedores que no se plantean la legalidad de inicio, consiguen abrir su negocio en días. Se dan de alta con cualquier actividad ajena a la gestión de residuos y listos. Digamos que son nuestro LOW COST & FAST gestión de residuos. Son nuestra versión latina de ventanilla única. Lamentablemente ilegal.

En cambio, los gestores legales, con un buen expediente, con avales y seguros, con presentación de un completo proyecto visado de actividad, han de esperar varios años para que su actividad se legalice formalmente. Es una situación de claro agravio, que no favorece las buenas prácticas y la lucha contra la receptación. En mi opinión, los gestores de expediente impoluto tendrían que ser autorizados inmediatamente con un mínimo de requisitos de acuerdo a la ley. Luego, si las cosas de palacio van despacio, pues que vayan. La administración solicita suficientes requisitos económicos (avales y seguros) que permiten un alta rápida y sin riesgos. Si los hubiera, queda la responsabilidad penal del administrador. Más que suficiente.

Afortunadamente, la presión del Gremi con las diferentes administraciones va teniendo sus efectos. En Barcelona se están inspeccionando, por parte de los mossos d’esquadra, todos y cada uno de los negocios abiertos sin autorización para gestión de residuos o en trámite. Son buenas noticias, aunque por falta de efectivos la situación no es igual en todos los municipios. Motivo por el cual, los gestores con orientación ilegal abren sus negocios en municipios que por motivos diversos son muy laxos. Lamentamos que no tengan discriminadas las plantas ilegales de las que están en trámite. Solicito, desde esta tribuna, que se notifique separadamente las dos situaciones: una ilegal y otra legal en trámite.

Pero no todas las cosas se hacen bien en Barcelona. A pesar de las reiteradas denuncias e infructuosas reuniones, los ladrones de iglúes campan a su aire de forma invisible ante las administraciones.

Alguien, con excesiva serenidad, me dijo ante una situación que mostraba clara impaciencia: “tranquilo, las cosas se acaban arreglando solas. “

Pues al final le voy a dar la razón. Como consecuencia del bloqueo chino de residuos, el valor del contenido de los contenedores de papel ha caído en picado y ya no es rentable su robo. De repente, ha desaparecido el ejército de furgonetas y camiones ilegales. Mira por donde se ha resuelto solo el problema.

Siguen, eso sí, el ejército de recuperadores capilares de carrito hurgando los contenedores y zonas aledañas. Hoy, un periódico titulaba “Recoger chatarra 10 horas al día por 500 € al mes”. Puedo entender cierta tolerancia ante la miseria de nuestras calles, pero no tanto el despilfarro del consumidor. Sigue siendo demasiado habitual el descuartizado de enseres en las aceras. Estos alimentan a furgonetas ilegales que realizan transacciones en plena vía. Hace pocos días presencié, en el tiempo de una cerveza, el proceso de descuartizado de un RAEE en plena acera y al cabo de unos minutos la venta a una furgoneta ilegal. Eso sí, en la exclusiva y elegante calle Tuset. ¿Serán furgonetas invisibles?

Si se controlaran las furgonetas ilegales callejeras se evitaría el desguace callejero. En el mismo artículo de hoy se detallaba que los recogedores de calle, si pueden, descargan en un gestor. Este gestor, si esta legalizado, comprará los enseres urbanos sin desguazar. Sobre él pesa la responsabilidad de un centro legal, con avales, seguros y un largo proceso de legalización. No es tan complicado poner coto a la ilegalidad y a sus malas prácticas. No falta tanto para hacerlo bien.

Como no hay una noticia importante sin que venga otra al poco, después del golpe de timón de China a finales de año con los residuos contaminados, ahora le ha tocado protagonismo a los EEUU con los aranceles para, en principio, proteger los productos de aluminio y acero. Ello ha provocado convulsiones a la baja a los metales y empresas cotizadas que nadie sabe con certeza qué alcance tendrá. China, a su vez, parece que va a responder proporcionalmente. La incertidumbre sobrevuela en la libre circulación de mercancías y con ello es probable que se enfríe la recuperación económica global. Habrá que esperar si solo es un acto de gallardía política o si se consolida una nueva era de regresión del comercio mundial. A grandes rasgos, la libre circulación de mercancías ha evitado conflictos bélicos y ha hecho progresar la economía de la mayoría de los países. En mi opinión, se está mezclando demasiadas cosas: dumping productivo, violación de patentes, mano de obra barata. Pero también los efectos de la tercera o, según otros ya, la cuarta revolución industrial (Industria 4.0) con la pérdida de empleos masivos en clases obreras y medias.

Por último, llegan buenas noticias desde Inglaterra. En breve será el segundo gran país europeo, después de Alemania, en implantar el depósito para los envases de un solo uso.

Me enorgullezco de dirigir un Gremi de recuperadores que anticipa los negocios que pueden beneficiar a nuestros agremiados. Habrá que esperar que España decida entrar en el siglo XXI en la gestión de residuos de un sólo uso, o esperar cicateramente a ser los últimos de la fila.

Xavier Riba,

Presidente del Gremi de Recuperació de Catalunya
xriba@gremirecuperacio.org

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Artículo Revista Recupera 104